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Limerencia, cuando el amor se transforma en obsesión

Cuando nos enamoramos se produce una revolución en nuestro cerebro y eso desencadena algunas consecuencias que a veces parecen hacernos perder la cabeza: anticipamos encuentros con la otra persona, podemos tirarnos horas pensando en ella o él, escribiéndole, hablando por teléfono, imaginando al otro, viendo fotos, sentimos nerviosismo, taquicardias, incluso ansiedad antes de ver a esa persona de la que nos estamos enamorando.

Esto es normal al principio de las relaciones así como cuando conocemos a alguien que despierta una enorme atracción en nosotros. Pero este proceso, cuando se alarga y las consecuencias de ese enamoramiento se agravan, puede llegarse a convertir en un trastorno obsesivo llamado limerencia.

¿Qué es la limerencia?

La limerencia se define como una obsesión por la persona amada así como por conseguir su amor. Implica la existencia de pensamientos intrusivos o incontrolables respecto a esa persona con la que, más que enamorados, lo que ocurre es que se está obsesionado con la otra persona.

Como he dicho, durante el enamoramiento los cambios producidos, sobre todo por el sistema límbico, influyen en algunos neurotransmisores como la adrenalina y noradrenalina, la dopamina o la serotonina y producen ciertas reacciones a nivel cognitivo y fisiológico que pueden hacernos pensar que estamos perdiendo la cabeza. 

Sobre todo vemos que a nivel racional, todo lo relacionado con la persona objeto de amor, no funciona muy bien. 

Los cambios producidos también nos afectan fisiológicamente y pueden dar lugar a tartamudeos ante la presencia de la persona amada, labios secos, ansiedad, temblores o torpeza motora.

Sin embargo, cuando el enamoramiento es normal, esas sensaciones se van atenuando con el paso del tiempo dando lugar a una relación más funcional donde, pasadas unas semanas o un par de meses a lo sumo, podemos evaluar a la otra persona de forma más racional así como dedicar nuestros pensamientos y nuestra energía mental a otras actividades objeto de nuestro interés (estudios, trabajo, amigos).

Cómo saber si estoy obsesionado con alguien:

obsesion con la pareja

Cuando se da la limerencia estos síntomas no van en descenso y por tanto pensar y dedicar la mayor parte del tiempo a la persona de la que se está enamorado o enamorada tiene consecuencias en nuestro día. 

La obsesión por la persona amada y el deseo de que esta nos ame también puede llevar a que la persona con limerencia tenga con la otra persona un comportamiento de acoso, incluso de chantaje con el objetivo de ser correspondida en ese amor. 

No sólo es a nivel de comportamiento, a nivel cognitivo la limerencia tiene como característica central la dificultad de concentración en otros temas no relacionados con la persona objeto de amor. Los pensamientos acerca de la otra persona son de tipo intrusivo y se perciben como incontrolables. 

Esos pensamientos pueden aparecer en forma de preocupación, en forma de imágenes, como soñar despierto con la otra persona, imaginar que se conversa con él, presencia de pensamientos mágicos, como por ejemplo, el pensar que si se piensa en la otra persona es porque él o ella también está pensando en tí, creer que se tienen encuentros mentales con el otro, etc.

Síntomas de limerencia:

Síntomas de la limerencia a nivel cognitivo

  • Obsesión o pensamientos recurrentes relacionados con la persona amada.
  • Pensamientos intrusivos o incontrolables relacionados con la persona objeto de amor.
  • Preocupación excesiva por hacer que la otra persona esté bien a su lado.
  • Ansiedad o temor que la otra persona no esté enamorada de uno.
  • Encuentros mentales con la persona amada con la que se experimenta un bienestar similar al generado por encuentros reales.
  • Dificultad de concertación en otras actividades no relacionadas con la persona amada.
  • Idealización de la persona amada
  • Pensar que las fantasías que se tienen con la otra persona son parte de la realidad

Síntomas de la limerencia a nivel conductual

  • Conductas impulsivas dirigidas a obtener o a demostrarse el amor de la otra persona.
  • Aparición de conductas relacionadas con los celos.
  • Comportamientos excesivos destinados a tener contacto con la otra persona: llamar, mensajear, seguir a la persona amada.
  • No respetar el espacio de la otra persona.
  • Investigar a la persona amada.

Síntomas de la limerencia a nivel fisiológico:

  • Taquicardia
  • Sudoración
  • Temblores
  • Debilidad muscular
  • Disminución del apetito
  • Dificultad para pensar y expresarse con claridad frente a la persona amada
  • Ataques o crisis de ansiedad

¿Qué puedo hacer si creo que estoy obsesionándome con alguien?

No es fácil admitir que estamos obsesionados con alguien, pero si identificas varios de síntomas anteriores con lo que te está ocurriendo trata de no seguir alimentando esa obsesión con la persona objeto de tu amor u obsesión. 

Para ello, intenta dejar de hablar de ella con otras personas.

Trata de alejarte mentalmente de esa persona, no revises sus redes sociales, no le envíes mensajes, no busques información acerca de esa persona.

Si te está costando olvidar a alguien, o el pensar demasiado en otra persona está afectando a tu vida diaria puedes buscar ayuda psicológica. En Epsiba Psicología podemos ayudarte.

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Escrito por Esther Blázquez Álvarez, psicóloga en Epsiba Psicología.
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